¿Quién tiene derecho a una pensión por invalidez?




Poco se conoce respecto al tema, incluso personas aptas para percibir el beneficio de una pensión por invalidez, no cuentan con la información suficiente o recursos profesionales para el adecuado asesoramiento.

En muchas ocasiones, personas han sido objeto de estafas por parte de pseudo profesionales que con intención de beneficiarse directamente, prometen gestiones rápidas y garantizadas, alterando el curso legal de los procedimientos a seguir, por consecuencia, lo que suponía ser un beneficio se convierte en un trastorno para el beneficiario.

Parte fundamental del proceso de la solicitud de pensiones por invalidez se centra en el debido asesoramiento médico jurídico y en profesionales, abogados o graduados sociales que le respalden en la tramitación.

De mas esta decir, que quien anhela con percibir una pensión de incapacidad, deberá, si o si, demostrar su incapacidad a través de evaluaciones de salud que serán luego examinadas por una junta médica.

¿Qué patologías o enfermedades son beneficiarias de una pensión de incapacidad permanente?:

Fibromialgía, síndrome fatiga crónica, depresión, cáncer, esquizofrenia, trastorno bipolar, hernia discal, artritis, artrosis, ansiedad, infarto, enfermedad mental, agorafobia, apnea del sueño, ludopatía, sensibilidad química, sordera, migraña, escoliosis, diabetes, estrés, drogadicción, alcoholismo, VIH, entre otras.

¿A quién acudir para iniciar la gestión?:

No deje que le hagan falsas promesas, el procedimiento legal debe cumplirse.

Brindar siempre información fidedigna respecto de la viabilidad de su caso.

Buscar asesoramiento integral para que la reclamación ante el Instituto Nacional de la Seguridad Social tenga éxito.

¿Cómo identificar si se debe solicitar la pensión?

Si padece alguna enfermedad o lesión que le impida trabajar (invalidez absoluta), o bien que le impida trabajar en la que siempre fue su profesión habitual (invalidez total), o que además de impedirle trabajar en toda profesión requiere de la ayuda de una tercera persona, asesórese.

¡El asesoramiento médico jurídico es indispensable!