Clkier csa t mndo un msj ;)

La vida moderna de este nuevito siglo XXI se define por las comunicaciones. estamos, todo el tiempo, conectados a todos los que quieran conectarse con nosotros.

Celulares, MSN, mails, blogs, flogs, foros, el infotrans, sexyono, twitter, tiramelagomaonline, y laaaaaaaaaargo listado de etcéteras que nos conectan todo el tiempo, lo queramos o no.

Se imaginan la vida hoy sin celulares?... A mi me cuesta pensar como se resolvían las cosas mas básicas sin estos bichitos metálicos plasticoides. Es impresionante la incidencia que tienen los celulares en nuestra cotidianeidad. Nos resuelven miles de cosas: desde las típicas excusas de "es por seguridad, para estar mas tranquilos" de los padres, hasta poder encontrarte en algún pueblito perdido del Norte cuando el grupo se dispersó en aquél viaje de mochileros.



Sin contar cosas como quedar en puntos de encuentro para después de un recital, avisarle a tu amigarche que te espera en la puerta que "tas en el colectivo", y hasta tener siempre algo con que distraerse en el lugar que sea que haya que esperar (desde el mega clásico de la viborita del glorioso Nokia 1100 hasta chusmear qué mensaje escribe la rubia que se sento al lado...).

Algunos años atrás, si tenias un celular eras cool. Más si tenia tapita o pantalla a color. Hoy por hoy, el que no tiene celular no es un inadaptado, es más bien un ilocalizable. Y para ser cool ya no alcanza con que tenga camarita: tiene que tener bluetooth, un fondo de pantalla distinto cada semana, y que cuando llegue un mensaje le suene con la cancion del Puerco Araña. Como mínimo.

Sin embargo, toda esta conexión, todos estos colores, sonidos y descargas... nos comunican más? Nos permite conocernos mejor? Entenderemos más al sexo opuesto gracias al glorioso SMS?... Justamente, hablando de los mensajes de texto en particular, yo creo que incomunican más de lo que conectan. Creo que la invención del mensaje de texto ha cambiado completamente la forma de comunicarnos, sí, pero para mal: trae demasiadas complicaciones. Imaginemos esta situación: chica conoce a chico, se gustan, él le pide el teléfono (celular, obvio) e intercambian numeros. Un par de días después, alguno de los dos decide mandarle un mensaje de texto al otro. Planea cuidadosamente cada letra, como si se tratara de un robo a un casino: no sea cosa de que muchas mayúsculas o tildes le hagan parecer hinchabolas. Digamos que manda lo siguiente: "hola, como andas? haces algo el finde?". La pantallita le respónde: Mensaje enviado exitosamente!". Pero los minutos pasan, las medias horas pasan, y la respuesta nunca llega...



Su cabeza entonces empieza a carburar a toda maquina, aceitada por la ansiedad. Las excusas del silencio taladran su cerebro, desordenadas, desde las más racionales hasta las más paranoicas. La primera: "No tiene crédito". La segunda: "Se quedó sin bateria". La tercera: "Me verseó con el número y acabo de invitar a un/a desconocido/a a salir el finde". La cuarta: "Capaz que justo le chorearon el teléfono unos chabones… y lo/a lincharon por resistirse… pobre…". Y la quinta, la peor de todas: "El/la muy hijo/a de re mil puta no responde para hacerse el/la interesante y la reconcha de la lora, quedé re fácil, soy un/a pelotudo/a, por qué no esperé que me mensajeara él/ella y AAAAARRRRRGHHHHH!!!...".

Que cosa horrible esperar un mensaje de texto de una persona que nos gusta!...
Es un sufrimiento indescriptible: genera muchas más dudas que certezas. Esconde mucho más de lo que muestra. Y, encima, son caros. A veces demoramos una hora y gastamos millones en mensajes de una página (borrando cada letra innecesaria para que no necesite dos), cuando en realidad con un llamado esa conversación se tenía en 15 segundos y por mucho menos presupuesto.

Basta de esto, muchachos y muchachas. Llámenlo, llámenla, y dejemonos de joder. Si realmente el/la afortunado/a de turno tiene ganas de vernos, no le parecera que le estamos "presionando" por llamar en lugar de enviar un mensaje. Y si le parece, que se joda. Ellos se lo pierden.